Ruta circular por el río Roche, las calas de Roche y el faro de Roche, combinando paisajes fluviales y costeros. 8 senderistas y una mascota llamada Lola, cuya compañía fue una alegría para todos. Una caminata de dificultad fácil que destaca por sus impresionantes vistas al mar, las pequeñas calas escondidas y el encanto del río Roche. Durante el trayecto, los senderistas disfrutaron de momentos de buena compañía y conexión con la naturaleza, con Lola sumándose al espíritu explorador. Puntos de interés: Las calas de Roche, de aguas cristalinas; el faro, un mirador perfecto hacia el océano; y el tranquilo curso del río Roche, rodeado de vegetación. Una experiencia que combina paisajes variados y un ambiente amigable, ideal para desconectar y disfrutar del aire libre.