Aunque la ruta ha sido un poco dura, el clima nos ha acompañado y hemos podido disfrutar de unas vistas fantásticas desde lo alto de la cima de Las Grajas. El vuelo de los buitres, el vuelo de los parapentista y las vistas del pantano de Zahara de la Sierra (O de Algodonales) de la gran mole de la sierra de Grazalema… nos han hecho pasar una jornada inolvidable.