Iniciamos la ruta en el área recreativa Buitrago (Aznalcazar) desde donde dejamos el coche en un amplio aparcamiento. La ruta es cómoda y sin desnivel. Dicha ruta la podemos considerar como un largo paseo por la naturaleza. La ida la hemos realizado por la parte derecha del rio el cual lo podemos ver en pocas ocasiones por la maleza que hay en sus márgenes. Aun así, merece la pena realizar es bonito paseo. Una vez en el vado del Quema, cruzamos el rio que en esta ocasión lleva poca agua y tras la visita obligada al pequeño recinto de la Virgen del Rocío, iniciamos la vuelta no sin antes dar buena cuenta del “bocaillo” del día. La vuelta igualmente la hacemos por el margen derecho del rio pero que evidentemente al ser de vuelta vamos por la otra parte del rio. Este carril no tiene el atractivo del que traíamos de ida pero tiene dos entradas al rio en los cuales podemos encontrar un bonito entorno frondoso y una pequeña área donde disfrutar del lugar. Es recomendable visitarlo porque es impresionante su vista. Tras este punto, solo nos queda recorrer un par de kilómetros más y estamos de nuevo en el punto de partida. La ruta la hemos considerado de dificultad moderada por su longitud y porque en ciertos momentos el calor ha podido ser un poco asfixiante en nuestra opinión.